Un revuelto de ideas, pensamientos, y de todo un poco. Producto de una mente absurda y un poco loca.

domingo, 20 de noviembre de 2016

25 DE NOVIEMBRE, DIA INTERNACIONAL DE LA VIOLENCIA DE GENERO

  Hoy me he pasado todo el día buscando información, sobre la relación entre el nivel cultural, o sea, la educación,  y la violencia de género.
   He estado leyendo distintos artículos, foros, documentos, estadísticas. En algunos he tenido que leer infinidad de datos y números, otros eran opiniones de la gente de la calle, pero nada oficial, que era lo que yo buscaba.
   La conclusión a la que he llegado al final ha sido que no hay relación alguna, no hay más casos de violencia en familias con menos nivel cultural, ni al contrario.

   Mi intención con esto era escribir un artículo para que luego mis hijas y con suerte otros chicos y chicas pudieran leerlo, además de sus padres, madres y algún profesor o profesora. Porque para mí la educación lo es todo, no solo para obtener una profesión en el futuro, sino porque nos abre la mente, nos hace libre, nos permite entender lo que nos rodea.

   Sin embargo, si que hay algo común en todos los artículos que he leído, el hecho es que la educación no esta relacionado con el numero de casos de violencia de genero, de acuerdo, pero eso no significa que no sea importante. Sobre todo porque lo que si importa en este caso es la igualdad, con  eso si esta relacionado.

  El problema en este tipo de violencia es que no hay igualdad de genero, uno de los dos se siente superior, y hace que la otra parte se sienta inferior, y acabe maltratada. Obsérvese que no he hablado en ningún momento de hombres ni mujeres, ya que hemos llegado a un punto en el que la violencia de género no es sólo de hombres a mujeres, sino de mujeres a hombres(los menos), de mujeres a mujeres(parejas lesbianas) y de hombres a hombres(parejas gays). En todos casos, es violencia de género, y  en todos estos casos es por falta de igualdad.

  Esto es lo que hay que enseñar en las escuelas, la igualdad, TODOS SOMOS IGUALES, seamos hombres o mujeres, nadie es superior, todos tenemos nuestras cualidades y nuestros defectos y todos dependemos de todos,

   Si no aprendemos a aceptarnos los unos a otros tal y como somos, no podremos erradicar esta lacra social que es la violencia de genero en particular, y la VIOLENCIA en general, por que  esto lo podemos extender mas lejos, religión, política, razas,..


   Me gustaría que este artículo, fuera un pequeño llamamiento para que entre todos educáramos a nuestros niños en la IGUALDAD, para que el día de mañana, ningún hombre ni mujer se sienta ni mas ni menos que nadie, y todos trabajemos codo con codo, seamos una unidad, apoyandonos unos a otros.

viernes, 18 de noviembre de 2016

HAMBURGUESA CASERA DE CERDO, CON JUDÍAS VERDES, ZANAHORIAS Y PATATAS ALIÑADAS CON SEMILLAS






   Esta ha sido mi comida de hoy, como ya he contado, debido a mi reciente diabetes, he cambiado mis hábitos alimentarios para reducir el nivel de glucosa  y además estoy perdiendo peso.

   Uno de los hábitos que he aprendido ha sido la regla del plato, que se trata de poner en el plato la mitad de verdura y en la otra mitad un cuarto de hidratos y la otra de proteínas. En este caso la mitad de mi plato es de judías verdes, y en la otra hay patatas cocidas, y hamburguesa casera de cerdo.

   Otro hábito ha sido el de no comer hidratos por la noche, está solo ha sido por el tema de la diabetes, durante el día comparto la cantidad de hidratos diaria que debo tomar entre el resto de las 4 comidas, o sea, desayuno, media mañana, comida y merienda.

  Las recetas procuro que sean sencillas, ya que algunas comidas son distintas a las de la familia, sobre todo las cenas, y me resulta tedioso hacer doblete, así que la sencillez es lo que prima.

   Esta de hoy es de lo mas sencillo:
    Hamburguesa de cerdo: 200 gr de carne picada de cerdo y especias: sal, 5 pimientas, jengibre en polvo, curry, guindilla en polvo, ajo en polvo. De estas especias solo una pizca. Se mezclan bien, se hace la hamburguesa y a la plancha.

   Las patatas y las zanahorias las he cocido en sal, ya peladas, las judías enteras al vapor, aparte. Luego les he añadido un majado de aceite de oliva virgen extra(AOVE), ajo y perejil, y encima una mezcla de semillas de la marca Hacendado. En vez de pan, he comido algo más de patatas. De postre una pera, Y mucha agua.

   Como puede verse, un plato sencillo, con todos los nutrientes necesarios para que sea saludable, con mucho colorido para que entre bien por los ojos, y no aburra, y sabroso.


   Seguiré poniendo más recetas, tengo muchas guardadas, para que veáis como he conseguido en 2 meses regular mi azúcar y perder 6 kilos, comiendo de todo.

miércoles, 16 de noviembre de 2016

ME HAGO MAYOR... Y QUE MAL ME ESTÁ SENTANDO

   Pues si, me hago mayor, vieja, como dicen mis hijas. Es algo que voy sintiendo todos los años, en el día del cumple de mi hija mayor sobre todo, que fue el lunes 14, este año ha cumplido 14 años, y cada año que pasa me siento aún más mayor. Ella se hace una mujer, y yo una vieja. Así me siento. Y lo que es peor, siento que he perdido mis años de juventud sin haberlos aprovechado en absoluto.
    Porque cuando veo otros blogs, miro en Instagram, en Facebook, o Twitter, a todas esas mujeres y hombres, que viajan, y tienen esas vidas tan llenas de experiencias, miro la mía y no puedo evitar sentirme vacía. Yo no he salido a muchos sitios, de España conozco poco, y de lo que conozco solo he salido a trabajar. Del extranjero, si, viví en Australia 4 años, pero fueron entre los 3 y los 7 así que guardo pocos recuerdos en mi memoria, aunque los atesoro como joyas.

   Me gustaría haber hecho más cosas, visto más mundo, poder tener mas experiencias en mi vida, mas recuerdos guardados, porque al final de la vida, es lo único que nos queda, lo vivido. Lo material no sirve de nada, solamente la vida que hayas vivido y disfrutado es lo que cuenta, de nada sirve juntar tesoros, dinero, propiedades, si durante todo el tiempo que has estado en este mundo no has experimentado un momento en algún lugar precioso, si no te has emocionado con una puesta de sol, si no has conocido un plato exótico en un país exótico,... todo lo demás no merece ser guardado.

   Esto también vale con lo que has hecho con tu vida. Veo a mucha gente feliz con lo que hacen. Y me dan envidia. Da igual lo que seas, desde un humilde barrendero hasta un gran médico o abogado, si lo que haces te llena plenamente, serás feliz. El problema viene cuando no estás a gusto con tu trabajo, con tu vida, contigo mismo. Y te conviertes en una persona infeliz, muy infeliz. Y esa infelicidad hace que los años se desperdicien. Y los años perdidos ya no se recuperan, jamás.

   Ahora, a mis 46 años, me doy cuenta de esto, y me siento mayor y totalmente infeliz, viendo como he desperdiciado una vida, que quizás podría haber sido distinta. Puedo intentar cambiar algo, pero no se puede recuperar 25 años de golpe.

   ¿Alguien que tenga una máquina que me vuelva más joven?

viernes, 11 de noviembre de 2016

A LO MEJOR ESTA VEZ LO CONSIGO

   Pues resulta que en el mes de abril de este año,  me diagnosticaron Diabetes Mellitus tipo 2.
   Fue un shock para mí.
   Al principio, pasé por todas las fases de un duelo: primero, la negación: cuando el médico miró mi analítica y me dijo que era diabética, solo se me ocurrió decir que no, y no, varias veces además. El pobre doctor me miraba atónito, le faltó sacar el título de medicina para demostrarme que el era el médico y no yo, pero se limitó a sonreír, calmarme, enseñarme los resultados y explicarmelos. Tambien me explicó qué medicación tomar, y como cambiar de hábitos, alimentarios y de vida en general. Más que nada porque soy obesa, concretamente, tengo obesidad morbida, tipo 3.
    Siguiente fase: negociación, intenté negociar con el médico, si me portaba bien un tiempo,¿ podría curarme?, bastante bien sé yo, que la diabetes no se cura, soy auxiliar de enfermería, Pero había que intentarlo.
     La tercera fase: depresión, estuve una semana llorando mi desgracia, ¿porqué a mí?,¿cómo había podido llegar a esto? y venga llorar y llorar.
     La cuarta fase:Ira, cómo me enfadé conmigo mismo, mucho, porque obviamente, era culpa mía, me he dejado mucho estos años, no me he cuidado nada, confiada en que mis analíticas eran envidiables a pesara de mi exceso de peso, ni colesterol, ni tensión alta, azúcar, ni nada de nada. Exactamente eso, exceso de peso y de confianza, eso es lo que me habia pasado factura. Y ahora tocaba patalear todo lo que hiciera falta, Porque al final, me había llegado una de las tan temidas enfermedades que me habían augurado los médicos desde hacía 20 años de exceso de peso.
      Y al final, llegó la quinta y última fase: aceptación, si, me convencí, tomé conciencia de que era lo mejor que podía pasarme, y ¿porqué?, pues porque al final, conseguí cambiar mis hábitos.
   

      Ahora como mucho más sano, combino mejor los alimentos, sigo comiendo de todo, pero sin abusar, me acostumbré a no picar, tengo ayuda psicológica claro, porque soy comedora compulsiva y hay días que no podía evitar ir a picotear, pero poco a poco he ido controlando esos impulsos, y ya  en casa no hay ni patatas fritas, ni bolsas de chuches, y aunque las haya, no tengo ganas de comerlas, es más, aunque me apetezca, soy capaz de controlarme. Esto es mucho ganado para mi.

      Ya llevo unos 7 kilos perdidos, no es mucho desde abril, pero mejor despacio, así es mas difícil recuperarlos. También he conseguido que mis niveles de glucosa vuelvan a estar normales, aunque sigo siendo diabética, y medicandome, pero ya se qué hábitos seguir.

     La lucha ha sido dura, sigue siendolo, y seguirá. Hay días que tirarías la toalla, porque no depende todo del la comida, el día a día y lo que te rodea también te condiciona, y cuando tienes un mal día en el trabajo, con las vecinas, la familia, el marido o las niñas, o simplemente la vida que te tocó vivir, lo primero a lo que te da gana echar mano es a esa bolsa de gusanitos que lleva una semana abierta, aunque estén rancios, o hacerte un bocadillo de salchichón, o de paté. Sólo el poder sentarte y respirar tres veces, y decir no, y luego levantarte y comerte un yogur o tomarte un café, es el logro más grande para mí, incluso que haber bajado de peso.

      De ahí el titulo de este post, quizás después de muchos años de intentos, esta vez puede que lo consiga, y de una vez me quite todos estos kilos que arrastro desde los 14 años, y me convierta en la mujer sana que siempre debí ser.

      Tengo poco tiempo y muchos proyectos, pero voy a intentar ir poniendo al día el blog, para ir informando de mi salud, mi peso, y poner mis recetas con mis fotos, de lo que como, para que veáis que estoy haciendo para conseguirlo,

DE VUELTA EL INVIERNO

    Pues si, ya está aquí de nuevo, y como no, mi tristeza. No me gusta nada, ni el frío, ni los días cortos, ni las nubes, la lluvia, los paraguas, el montón de ropa que hay que ponerse, el brasero.
    Soy mujer de verano, dias largos, sol, piscina, vacaciones de mis niñas, no hay deberes, ni examenes, menos ropa, mas fiestas populares, mucha terracita, mas ensaladas, menos guisos, en fin, que el verano, para mi, es mejor.
    Obviamente, no a todo el mundo le gusta el verano, pero para gusto, colores.